Feijóo acusa a Sánchez de «hooligan» y de incendiar el problema con Ferrovial
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Madrid, 3 mar (.).- El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha acusado este viernes al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de ser «más hooligan que nadie», «insultando» a Ferrovial (BME:FER) y a su presidente, Rafael del Pino, y de estar «incendiando el problema» que supone el traslado a Países Bajos de la sede de esta multinacional española.
«Llueve sobre mojado», ha denunciado el líder de la oposición en declaraciones a los periodistas en los pasillos del Congreso, donde ha instado al Ejecutivo a buscar soluciones para que las empresas «confíen» y «se queden en España», en lugar de optar por el «insulto y el señalamiento personal» que «produce efectos negativos».
Feijóo ha explicado que de ser él el presidente del Gobierno llamaría a la empresa para «saber qué es lo que gana yéndose de España» y valorando posibilidades de que «gane lo mismo manteniéndose en España» por ejemplo estudiando la opción de «cotizar en varios parqués bursátiles».
Ha denunciado además el presidente de los populares una situación de «desgobierno» ante una «muy mala noticia para España». Reprocha que la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, diga que se van «para pagar menos impuestos», el portavoz del Grupo Socialista que «van a pagar más», la ministra de Asuntos Económicos que «van a estudiar a ver si se puede cotizar en dos parqués» y «adicionalmente el presidente del Gobierno» siendo «más hooligan que nadie».
Feijóo ha censurado así la crítica lanzada ayer por Sánchez desde Copenhague, donde acusó al presidente de Ferrovial de no estar comprometido con su país por la marcha de la compañía, que fuentes de Moncloa atribuyeron a intereses personales de la familia Del Pino.
El líder del PP ha dicho haberse llevado un «disgusto institucional y personal» ante el anuncio del traslado de esta multinacional y ha pedido trabajar para que los accionistas, que son los que toman la decisión «tengan elementos» para no adoptarla y por «disminuir la tensión provocada por el Gobierno con las empresas españolas».
