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La cumbre del G20 comienza en Bali con la guerra de Ucrania encabezando la agenda


Los líderes mundiales se reúnen durante la cumbre de líderes del G20 en Nusa Dua, Bali, Indonesia, el martes 15 de noviembre de 2022. Dita Alangkara/Pool vía REUTERS

Por Leika Kihara y Fransiska Nangoy

NUSA DUA, Indonesia, 15 nov (Reuters) — El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, dijo el martes a los líderes de las naciones más ricas del mundo que ahora es el momento de poner fin a la guerra de Rusia en su país con un plan de paz que ha propuesto.

Zelenski se dirigió por videoconferencia a los líderes del Grupo de los 20 (G20) reunidos en una cumbre en la isla indonesia de Bali, ensombrecida por la guerra en Ucrania y la preocupación por la inflación mundial y la seguridad alimentaria y energética.

Zelenski dijo que la guerra debe terminar «con justicia y sobre la base de la Carta de la ONU y el derecho internacional».

Pidió que se restablezca la «seguridad radiológica» en relación con la central nuclear de Zaporiyia, que se introduzcan restricciones de precios en los recursos energéticos rusos y que se amplíe una iniciativa de exportación de cereales. También pidió la liberación de todos los presos ucranianos.

«Por favor, elijan su camino para el liderazgo, y juntos seguramente aplicaremos la fórmula de la paz», dijo.

La cumbre se inauguró a primera hora del día con un llamamiento del presidente indonesio, Joko Widodo, a la unidad y a la adopción de medidas concretas para arreglar la economía mundial, a pesar de las profundas desavenencias por la guerra.

«No tenemos otra opción, la colaboración es necesaria para salvar el mundo», dijo. «El G20 debe ser el catalizador de la recuperación económica inclusiva. No debemos dividir el mundo en partes. No debemos permitir que el mundo caiga en otra guerra fría».

El G20, que incluye países que van desde Brasil a India, pasando por Arabia Saudí y Alemania, representa más del 80% del producto interior bruto mundial, el 75% del comercio internacional y el 60% de su población.

Una señal positiva en vísperas de la cumbre fue la reunión bilateral de tres horas entre el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el líder chino, Xi Jinping, en la que ambos líderes se comprometieron a mantener una comunicación más frecuente a pesar de sus numerosas diferencias.

La reunión del lunes era la primera vez que ambos se reunían en persona desde que Biden llegó a la presidencia y las conversaciones parecían señalar una mejora de las relaciones entre las superpotencias tras una espiral descendente en los últimos meses.

La cumbre del G20 se celebra por primera vez desde la invasión rusa de Ucrania en febrero, que Moscú ha calificado de «operación militar especial».

La guerra ha desencadenado llamamientos de algunos líderes occidentales para que se boicotee la cumbre y se retire la invitación al presidente ruso Vladimir Putin.

Indonesia se ha resistido, negándose a retirar la invitación a Putin y rechazando también lo que, según fuentes indonesias, ha sido una presión de los países del G7 para que condenen a Rusia en la cumbre de esta semana.

Rusia ha dicho que Putin estaba demasiado ocupado para asistir a la cumbre y que el ministro de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, ocuparía su lugar. Lavrov desmintió el lunes la información de una agencia de noticias que afirmaba que había sido trasladado al hospital de Bali por una afección cardíaca y que estaba presente en la reunión.

Sin embargo, no estaba claro si permaneció en la sala mientras Zelenski pronunciaba su discurso.

COMUNICADO CONJUNTO

Un comunicado conjunto del G20, que tendría que ser acordado por todas las partes, parece improbable, y en su lugar Indonesia está presionando por una declaración de los líderes, dicen fuentes diplomáticas.

Sin embargo, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, dijo que el lunes por la noche había un acuerdo entre los dirigentes sobre un texto de declaración, que calificó de «positivo».

Los líderes del G20 denunciarán el uso o la amenaza del uso de armas nucleares, según un primer borrador al que tuvo acceso Reuters.

Sin embargo, dicho comunicado tendría que ser confirmado por los dirigentes.

Las reuniones de los ministros del G20 no han dado lugar a comunicados conjuntos debido a los desacuerdos entre Rusia y otros miembros sobre el lenguaje, incluso sobre cómo describir la guerra en Ucrania.

Biden se mostrará «inflexible» en su defensa de Ucrania, según han dicho fuentes estadounidenses.

«No me adelantaré a las negociaciones finales, pero el G20 dejará claro que la guerra de Rusia está causando estragos en la gente de todo el mundo y en la economía global en su conjunto», dijo una fuente, que habló sobre la opinión de Estados Unidos en la cumbre bajo condición de anonimato.

Sin embargo, Xi y Putin han estrechado cada vez más su relación en los últimos años, y reafirmaron su asociación pocos días antes de que Rusia invadiera Ucrania. Sin embargo, China se ha cuidado de no proporcionar ningún apoyo material directo que pudiera desencadenar sanciones occidentales en su contra.

El martes, Xi dijo al presidente francés Emmanuel Macron durante una reunión bilateral que China abogaba por un alto el fuego en Ucrania y por las conversaciones de paz, informaron los medios estatales chinos.

Biden y Xi «subrayaron su oposición al uso o amenaza de uso de armas nucleares en Ucrania» durante su reunión, según un comunicado de la Casa Blanca. Un comunicado del ministro de Asuntos Exteriores chino dijo que Xi le dijo a Biden que las armas nucleares no se pueden utilizar y que no se pueden librar guerras nucleares.

Occidente ha acusado a Rusia de hacer declaraciones irresponsables sobre el posible uso de armas nucleares desde su invasión de Ucrania en febrero. Rusia ha acusado a su vez a Occidente de una retórica nuclear «provocadora».

Al margen de la cumbre, muchos de los líderes mantendrán conversaciones bilaterales, y varios de ellos se reunirán con Xi, que sólo realiza su segunda visita al extranjero desde el inicio de la pandemia.

(Reporte de Fransiska Nangoy, Stanley Widianto, Nandita Bose, Leika Kihara, David Lawder y Simon Lewis en Nusa Dua, Kate Lamb en Sydney y Eduardo Baptista en Pekín; redacción de Ed Davies; edición de Raju Gopalakrishnan, editado en español por José Muñoz en la redacción de Gdańsk)

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